Poco antes de las 9 nos pusimos en
marcha, aquella mañana hacía un frío horroroso, y es que en esos días estábamos
con la ola de frío por España; pero lo gracioso es que las dos últimas veces
que hemos ido a Sevilla nos ha pillado allí la ola de frío.
Comenzamos por la CASA
PILATOS , la planta baja la haces por tu cuenta con audio guía
y la planta de arriba con guía, pillamos la visita de las 10’30 y el precio de
la vista completa, eran 8 € cada uno. Está visita nos decepcionó bastante, no
solo no nos avisaron de que estaban de restauración de algunas cosas, sino que
además los andamios estaban por el medio, así como también los currantes; nunca
me ha gustado que cuando algo este de obras ni te avisen y además te cobren la
entrada completa, me parece una estafa.
Volviendo hacia el centro pasamos por la Iglesia del Salvador y
decidimos entrar a verla (3 €), la iglesia está bastante bien.
Luego fuimos hacia la Catedral , pero claro era
mediodía y tenía una buena cola, así que decidimos dejarla para más tarde.
Decidimos acercarnos al río para hacernos las fotos con la Torre del Oro.
Luego pusimos rumbo hacia la Iglesia de la Macarena (gratuita), la visita fue bastante breve como suele ser normal cuando visitamos iglesias.
Como ya se iba a cercando la hora de
comer algo, decidimos buscar uno que vimos el sábado que estaba completamente
lleno; se llama “LA BODEGA ”
y está localizado en la Plaza
de la Alfalfa. Y
claro tanta gente no se podía equivocar, pedimos nuestras cañas como siempre y
unas aceitunas, para ir pensando que elegir, y nos decidimos por los montaditos
de jamón, que estaban de vicio, tanto que repetimos, no nos planteamos pedir
otra cosa; nos costó 15 €.
Luego al volver hacia nuestro hotel,
hicimos otra paradita para tomar alguna tapa más en nuestro habitual “LA SACRISTÍA ”.
Volvimos al hotel, revisamos correos,
y sobre las 3 y algo, volvimos hacia la Catedral , cerraba a las 5 así que teníamos tiempo
de sobra; la entrada 8 €. Visitamos la CATEDRAL en plan rápido, y luego subimos a LA GIRALDA y ya no había casi
gente. Alfredo se llevó una decepción cuando vio las rampas, porque no lo
sabía, yo sí porque había subido con mis amigas hace unos 20 años.
Después volvimos a la PLAZA DE ESPAÑA , ya que nos apetecía
verla un poco más tranquila que ayer, y aunque había gente, no tenía nada que
ver con el domingo; y además la luz del atardecer de esas horas era preciosa.
Después de unas fotitos, paseo y cervecita,
tapeo-cena en “LA SACRISTÍA ”.
Y luego al hotel que lo teníamos 2
minutos.
0 comentarios:
Publicar un comentario